¿De qué está hecha la corona de un implante dental?
Un implante dental es un dispositivo que funciona al atornillarse en el hueso maxilar de una persona, permitiendo la rehabilitación completa de una pieza dental que haya sido perdida, ya sea por un traumatismo o por caries, entre otras causas.
El implante dental consta de dos partes esenciales: el implante en sí y la corona.
El implante corresponde a un “tornillo” que se instala en el hueso que se encuentra por debajo de la pieza a rehabilitar y se incorpora al cuerpo humano a través del proceso de osteointegración. Es generalmente de titanio, debido a que es un material biocompatible con nuestro cuerpo.
Por otra parte, la corona es una funda dental que se ajusta al implante ya instalado y que busca tener la apariencia y la funcionalidad de un diente real. Las coronas son aplicadas no solamente en implante dentales, sino que también son utilizadas para reforzar dientes que estén afectados por traumatismos graves y que sea hayan roto. A la hora de colocar una corona se consideran dos factores: su estética y su capacidad de soportar las cargas mandibulares propias del uso de la dentadura.
Las coronas para implantes dentales pueden ser de diversos materiales. El más utilizado es la porcelana. Las coronas de este material cuentan con una gran similitud con un diente natural, posee una gran estabilidad de color con el transcurso del tiempo y es biocompatible con la boca del ser humano. Son las más frecuentes y accesibles. Son usadas principalmente para dientes delanteros (fines estéticos), ya que sus características son acordes a una pieza real, tanto en textura como color.
También existen coronas de metal cerámica, que son resultado de la combinación de ambos materiales y en donde la porcelana recubre una estructura base de metal. Con ellas se busca fortalecer la dureza de la cerámica y otorgar una mayor resistencia a la corona; por ello, son utilizadas en los molares, que son las piezas que soportan gran carga de la fuerza de las mandíbulas.
Por último, encontramos las coronas de zirconio, que al día de hoy son el gran avance en esta materia. Son hechas a partir de un cristal de óxido de zirconio que es esculpido para tener la forma de un diente. Es la opción más duradera, biocompatible y resistente. Posee un gran parecido a las piezas dentales reales e imita perfectamente el esmalte dental, al ser un poco traslúcido. Se pueden ajustar los colores de este tipo de corona para hacerla parecida a los dientes que estarán a los lados. Su valor es más elevado que el de las dos opciones anteriores.
Al momento de elegir cuál es el mejor material para un implante dental hay otros factores que inciden, como lo es su accesibilidad. Las tres técnicas te entregarán un implante funcional en el tiempo y aportarán una gran calidad de vida. Otro factor para considerar son las alergias propias de una persona. Esto hará que tu especialista te recomiende ciertos materiales sobre otros. Si quieres saber más sobre cuál es la mejor opción para ti o tu familia contáctanos en nuestra página web www.implanet.cl o nuestro teléfono +56 2 2759 0909 y agenda tu próxima visita a nuestras clínicas. ¡Te esperamos!
¿Cómo puedo maximizar el tiempo de duración de un implante dental?
Los implantes dentales son la mejor opción para recuperar la funcionalidad y la estética de un diente que hemos perdido. Con los años las ofertas han aumentado y cada vez son más accesibles. La decisión de instalarse uno es muy buena, especialmente si comparamos la duración de un implante dental con la inversión en dinero.
Los implantes dentales ofrecen el mayor tiempo de duración entre las alternativas tradicionales que han existido para rehabilitar dientes. Un implante dental bien cuidado puede llegar a durar hasta 25 años. De todas maneras, su margen de duración va de los 15 a los 25 años. Podríamos preguntarnos: ¿Qué factores influyen en la duración de un implante dental? A continuación, te dejamos algunos datos.
El principal factor que afecta la duración de un implante dental es la higiene bucal de la persona. La higiene cumple un rol fundamental en todo el proceso de implantación dental, desde el momento de la intervención, el post operatorio y en adelante. La buena higiene bucal supone un buen cepillado, uso de hilo dental, limpiezas dentales periódicas, visitas al dentista al menos una vez al año, etc. Si la higiene bucal es deficiente se puede producir que las bacterias se alojen en la superficie del implante, provocando inflamación de la membrana mucosa que se encuentra alrededor del implante (mucositis). Si la mucositis no es tratada a tiempo y se deja progresar puede provocar periimplantitis, la cual genera la pérdida del hueso alrededor del implante. Esto hace que el implante finalmente no se sujete bien y termine cayendo.
Otro de los cuidados que se deben tener es el evitar morder objetos duros, ya que el implante se podría romper. Además, dejar el tabaco es un muy buen complemento para cuidar de tu implante dental, ya que fumar puede producir deterioro en los tejidos que sujetan el implante.
Considera que la corona del implante dental puede presentar una menor duración, la cual puede alcanzar los 15 años. Esta pieza es reemplazable, ya que se ajusta al implante.
La salud del paciente también afectará el buen estado del implante. Es requerido mantener a raya las enfermedades periodontales y cuidar la salud en general de la persona. La diabetes o cáncer pueden afectar la duración de un implante dental. Consulta con tu especialista ante la aparición de enfermedades crónicas o si ya presentas alguna a la hora de la intervención.
Es importante que al momento de instalarte un implante dental optes por hacerlo en clínicas con buen equipamiento (tanto en materiales como tecnologías) y con profesionales que tengan una formación excelente en el campo y una buena técnica quirúrgica. Esto potenciará muchísimo el éxito y la duración que tenga tu implante en el futuro.
En nuestras clínicas cumplimos con los más altos estándares de calidad en implantología dental. Tenemos una larga historia de formación y perfeccionamiento. Pide tu próxima consulta llamando a nuestro teléfono +56 2 2759 0909 o visita nuestra página web www.implanet.cl ¡Estamos para ayudarte a recuperar tu sonrisa!
¿Quién inventó el implante dental?
El implante dental vino a revolucionar la historia de la odontología, convirtiéndose en la mejor alternativa para la rehabilitación oral de los seres humanos ante las pérdidas de piezas dentales. En los últimos años ha ayudado a miles de personas a recuperar sus sonrisas. Pero, ¿a quién le debemos esta tecnología?
El gran responsable de la creación de los implantes dentales es Per-Ingvar Brånemark, un cirujano ortopédico sueco y gran investigador en el área médica. Nació el 3 de mayo de 1929 y falleció recientemente en el año 2014.
Los implantes dentales funcionan a partir del fenómeno de la osteointegración, que se refiere al contacto directo que genera el titanio con el tejido óseo vivo, sin interposición de tejidos blanco. En otras palabras, es la capacidad que tiene un implante dental de fusionarse con el hueso natural del paciente, produciendo una unión sólida.
La osteointegración fue descubierta de manera fortuita por Per-Ingvar Brånemark en 1952, quien se encontraba realizando una investigación junto a un grupo de investigadores sobre los problemas de cicatrización de las heridas y la micro circulación de los huesos. Para la investigación ocuparon conejos, en los cuales insertaron cámaras ópticas de titanio en las patas de estos animales (específicamente en los huesos de la tibia y el peroné) para poder observar los cambios del tejido viviente en su circulación y a nivel celular. Luego de un tiempo notaron que les era imposible sacar las cámaras, ya que se habían integrado a los huesos de los conejos. A este fenómeno Per-Ingvar lo llamó osteointegración.
Ya en 1969 Brånemark y sus colaboradores publican su trabajo sobre su descubrimiento. Prontamente éste quiso ser probado en seres humanos y, después de varias experimentaciones, dió paso a lo que hoy conocemos como implante dental. El primer implante se realizó en el año 1965 y en la década de los 80 se extendió su uso, luego de que en 1978 se realizara la primera Conferencia de Consenso de implantes dentales. En esa oportunidad se juntaron y analizaron todos los datos existentes sobre implantación dental. Esto permitió que se establecieran las bases en términos de estándares para la odontología del implante, abriendo el camino para que sea utilizado por personas de todo el mundo como recurso.
Al día de hoy Per-Ingvar Brånemark es considerado el padre de la implantología moderna. En Gotemburgo, Suecia, se fundó el Centro Brånemark Osteointegración (BOC) en el año 1989.
El legado de Per-Ingvar Brånemark es invaluable y se constituye como uno de los avances científicos más importantes del siglo en el área de la odontología. La técnica de los implantes dentales ha demostrado ser un procedimiento seguro y eficaz. Al día de hoy podemos gozar de sus beneficios en nuestro país. En nuestras clínicas contamos con el equipamiento necesario para que tu implante sea todo un éxito.
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¿Son caros los implantes dentales en Chile?
La salud dental es un aspecto que tiene gran relevancia en la calidad de vida de una persona. Desde que nacemos es importante mantener hábitos de higiene bucal óptimos para que, a medida que avance la vida, podamos mantener en buenas condiciones nuestras encías y dientes, procurando perder la menor cantidad de piezas posibles.
El impacto de una mala salud bucal es inmenso, ya que puede repercutir en el procesamiento de los alimentos al comer o en nuestra apariencia física, lo que puede generar problemas de autoestima o incomodidad social. Es por ello que visitar al dentista es una tarea esencial que debemos mantener en nuestras vidas como un hábito. Se recomienda visitar al menos 1 vez al año al dentista, para poder solucionar inmediatamente cualquier problema que aparezca, ya sean caries o enfermedades a las encías.
A través de nuestra vida pasamos por diferentes etapas y, sin duda, todos hemos pasado por procedimiento dentales, ya sean extracción, tapaduras, frenillos, etc.
Sabemos que los gastos en términos de procesos odontológicos son elevados en general, pero la salud de nuestros dientes es invaluable. A pesar de que sea costoso, el aumento de la oferta en el mercado ha hecho que cada vez sea más accesible el poder visitar a un odontólogo y poder llevar a cabo lo que necesitamos. De todas maneras, queda un gran camino que recorrer todavía en torno a la accesibilidad de la salud dental.
Los implantes dentales se empezaron a desarrollar en nuestro país gracias al aporte de un grupo de dentistas que logró impulsar el primer programa de especialidad de Implantología Oral en Latinoamérica, para luego consolidar la Sociedad de Implantología Oral de Chile, hace más de 20 años.
En la actualidad, el valor de un implante dental varía entre los $450.000.- y los $700.000.- Este valor incluye lo que es el procedimiento quirúrgico ambulatorio (anestesia e implementos a utilizar), los servicios del o la odontóloga profesional, el implante de titanio y la corona que se atornilla sobre el implante. Es un precio que puede resultar alto para algunas personas, pero al tomar en cuenta que es un implante permanente que puede reemplazar una pieza dental por alrededor de 20 años puede llegar a entenderse el costo. Es una inversión para aumentar nuestra calidad de vida al recuperar una o más piezas esenciales para la dentadura, como un diente delantero que afecta nuestra sonrisa o una muela que nos ayude a comer mejor.
Es importante que elijas correctamente el lugar donde te realizarán este procedimiento y que la relación precio/calidad sea la correcta. En nuestras clínicas tenemos el equipo profesional necesario para que tu implante quede bien por mucho tiempo. Además, contamos con el mejor equipamiento e higiene.
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¿Duelen los implantes dentales?
Hoy en día los implantes dentales se encuentran a disposición de la población para la rehabilitación de una o más piezas dentales que se hayan perdido debido a traumatismos no tratados a tiempo, caries avanzadas, etc. Al momento de considerar esta opción es común preguntarse: ¿duelen los implantes dentales? Hoy queremos compartirte un poco de información al respecto.
Como hemos dicho anteriormente, la instalación de un implante dental supone la realización de una cirugía de carácter ambulatorio. Es decir, las encías del paciente serán intervenidas. El implante dental es un implante de titanio que es atornillado en el hueso maxilar de la persona, por lo que para acceder al hueso hay que cortar las encías ubicadas sobre él. Luego, el profesional atornilla el implante en el hueso y deja parte de él expuesto. En ese momento la cirugía termina y se procede a la espera de la cicatrización de las encías que ahora se posicionarán a los lados del implante. Se deberán esperar alrededor de 3 a 6 meses para que la cicatrización se haya completado. En todo este tiempo el paciente deberá visitar al dentista en controles periódicos, para monitorear el proceso y la posible aparición de infecciones o complicaciones.
Tomando en cuenta lo anterior, claramente los implantes dentales suponen cierto grado de dolor, principalmente en lo que es el post operatorio. De todas maneras, en el momento de la cirugía el dentista aplica anestesia local en el área a trabajar, lo que adormecerá la boca y mejillas. El paciente no sentirá nada de dolor cuando el profesional haga la incisión en las encías y atornille el implante al hueso.
En las horas posteriores a la cirugía la anestesia será procesada por el cuerpo y ya habrá percepción de las sensaciones en el lugar donde se intervino. Es en este momento en que puede haber dolor e inflamación, por lo que el dentista a cargo le recetará al paciente analgésicos y antiinflamatorios, los que la persona deberá tomar por un par de días en presencia de dolor en la zona. Es importante que no se administre aspirina, ya que es un anticoagulante y puede aumentar el sangrado natural de la herida. Hay una serie de medidas post operatorias que se deben seguir al pie de la letra, para evitar infecciones y procurar una buena recuperación. Tu dentista te informará de ellas en su momento.
Como todo procedimiento dental, los implantes dentales pueden presentar dolor localizado, lo que es normal y pasajero. Al cabo de unos días la inflamación bajará y seguirá el proceso de cicatrización, siempre que tengas el cuidado necesario en el post operatorio. Presentar dolor en exceso pasados unos días de la intervención es motivo para consultar con tu dentista.
En nuestras clínicas Implanet tenemos todo lo necesario para que la instalación de tu próximo implante dental sea llevada a cabo con poco dolor y gran potencial de éxito.
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¿De qué están hechos los implantes?
Los implantes dentales son considerados como uno de los avances más importantes del siglo XX en materia de salud dental. Es una tecnología que funciona a partir del principio de la osteointegración, que se refiere a la unión sólida que se genera entre el hueso vivo y un implante funcional. Fue descubierta por Per-Ingvar Brånemark (cirujano ortopédico sueco) en 1952, al estar investigando sobre la cicatrización. Ocupó cámaras ópticas de titanio para introducirlas en tibias y peronés de conejos, con lo cual buscaba observar mejor el tema de estudio. Él y su equipo se llevaron una gran sorpresa al percatarse de que las cámaras se habían adherido a los huesos de los animales.
Así, Brånemark desarrolla sus trabajos sobre osteointegración, revolucionando el área de la odontología y desarrollando un método nuevo para la rehabilitación oral. Tuvieron que pasar unos años para que los criterios y estándares se unificaran para dar paso a la utilización de este recurso en odontología. Hoy en día es considerado como un método seguro y que entrega una solución duradera a la ausencia de las piezas dentales, llegando a funcionar hasta 20 años.
El material principal del cual están hechos los implantes dentales es el titanio. Es un material que es altamente biocompatible con el ser vivo y que tiende a no ser rechazado por el cuerpo. En contacto con la atmósfera se oxida y su superficie se transforma en óxido de titanio, el cual se comporta como un material bioinerte. Además, es muy resistente, por lo que puede soportar la carga que requiere una pieza dental. Por otra parte, también posee cierta elasticidad, la cual se compara con la propia del hueso maxilar. Los implantes de titanio se integran al cuerpo a través de la osteointegración. La principal desventaja del titanio es su color gris, que puede llegar a verse cuando el paciente presenta encías retraídas en la zona.
Existe otro material que se está ocupando para implantes dentales: el zirconio. Es un material libre de metales, que es considerado como cerámica. Esto hace que sea una alternativa para las personas con alergias o problemas con el uso de metal. También es altamente biocompatible con el cuerpo humano, resistente y duro. Tiene la ventaja de ser blanco, con una tonalidad más parecida a la de los dientes. Esto evita que se vean zonas grises cuando se presenta recogimiento de encías. Los implantes de zirconio se integran al cuerpo a través de la biointegración, que se logra generando capas químicas entre el hueso y el implante.
El zirconio tiene algunas desventajas, como que el tiempo de espera para colocar la corona es de al menos 2 meses más que el de titanio algunos tienen un precio más elevado.
Si necesitas uno o más implantes, nuestras clínicas se encuentran a tu disposición con los más altos estándares de calidad en equipamiento y profesionales.
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¿Vale la pena el riesgo de los implantes dentales?
El procedimiento de instalación de un implante dental consiste en una cirugía ambulatoria, en donde se utiliza anestesia local para controlar el dolor. La instalación consiste en atornillar el implante en el hueso maxilar del paciente, para luego pasar por un período de recuperación de la encía y, finalmente, colocar la corona, lo cual deja la pieza funcional por muchísimos años (de 15 a 25 años), convirtiéndose en la mejor opción para recuperar una pieza dental.
El hecho de que sea una cirugía implica ciertos riesgos comunes a toda intervención de este tipo. Entre ellos podemos encontrar el riesgo de infecciones, por lo que el dentista y su equipo procuran ocupar instrumentos esterilizados y completamente aptos. Además, tu dentista te recetará los medicamentos analgésicos y antibióticos necesarios para evitar cualquier complicación relacionada a infecciones.
Por otra parte, es importante que sigas los cuidados post operatorios indicados por el especialista para reducir el riesgo de infección, los cuales incluyen una higiene bucal adecuada para cuidar las encías y ciertos hábitos saludables, como no fumar.
Inmediatamente después de la instalación del implante se pueden presentar ciertas situaciones que implican riesgo, como lo es el sangrado. Si es un sangrado leve que dura poco tiempo no hay de qué preocuparse. Generalmente disminuye para dar paso a la cicatrización, pero si aumenta o no se detiene debes consultar con tu dentista.
Otro de los riesgos comunes es que el implante sea rechazado, pero sin presentar mayores complicaciones. Para conocer el éxito del implante se deben esperar al menos 3 semanas desde la intervención. La caída del implante puede deberse a la ausencia de una correcta evaluación previa para conocer el estado de los soportes que tendrá en el futuro (hueso).
También los nervios pueden ser afectados en la instalación del implante, sumando ciertos efectos a los esperados, como lo son el dolor, entumecimiento y hormigueo de los dientes, lengua, labios, encías o mejillas. Esto se produce por haber golpeado o atornillado el implante muy cerca del nervio principal de la mandíbula inferior.
Ya que conocemos un poco más sobre los riesgos de un implante dental, cabe preguntarnos si vale la pena correr el riesgo. Y nuestra respuesta es sí.
Los implantes dentales al día de hoy son la mejor opción para volver a comer bien y aumentar la calidad de vida del paciente. Los riesgos que conlleva su instalación son controlables y raramente se presentan. Lo importante es requerir al dentista una buena evaluación previa al procedimiento y seguir al pie de la letra los cuidados post operatorios. Además, debes acudir a los controles que te recomiende el especialista para ir supervisando periódicamente la correcta sanación del implante.
Cuando te decidas por este tratamiento no dudes en llamarnos al +56 2 2759 0909 o visitar nuestra página web https://www.implanet.cl/. Contamos con profesionales completamente capacitados para llevar a cabo tu implante dental, quienes te realizarán una evaluación previa exhaustiva y te harán los controles necesarios para que la rehabilitación de la o las piezas dentales que requieras sea todo un éxito.
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¿Quién puede tener implantes dentales?
La pérdida de una pieza dental puede ser un momento difícil para nuestra salud e integridad física, ya que afecta directamente en nuestro procesamiento de los alimentos. Además, si la pérdida es de algún diente delantero nos podría afectar en nuestra autoestima y desenvolvimiento social. Pero las nuevas tecnologías han llegado para quedarse y nos ayudan también en este ámbito, permitiendo la instalación de los implantes dentales. Este tipo de procedimiento se ha ido desarrollando desde mediados del siglo XX y al día de hoy permite la rehabilitación oral de muchísimas personas alrededor del mundo.
Como se trata de un procedimiento médico es factible preguntarnos: ¿quién puede tener implantes dentales?. Existen una serie de requisitos para que puedas hacerte el procedimiento. A continuación, te explicaremos más sobre esto.
En primer lugar, es importante que la persona que quiera hacerse una instalación de implante dental sea mayor de edad y que su desarrollo óseo esté finalizado, ya que el implante dental se realiza a través de la osteointegración del implante en el hueso maxilar. Además, es necesario que tenga una salud compatible con este procedimiento, ya que es una cirugía ambulatoria con anestesia local. Es decir, la persona debe estar sana y, si es paciente crónico, es requerido que tenga bajo control sus patologías y esté de alta de su médico tratante. Sumado a esto, la persona necesita tener una salud mental compatible con el tipo de procedimiento que se va a realizar.
En segundo lugar, la persona que quiera tener un implante dental deberá contar con su hueso maxilar en buenas condiciones. Es muy común que al perder una pieza dental, el hueso que se encuentra por debajo del mismo se retraiga con el tiempo. Esto se produce debido a que el hueso no es estimulado constantemente, como lo sería con el uso del diente para masticar los alimentos.
Es contraproducente y no está indicado el instalar el implante dental sobre un hueso retraído. El hueso debe contar con la altura y amplitud necesaria para sostener el implante (de 8 a 10 mm de altura). El dentista hará los análisis necesarios para determinar si el hueso está en buenas condiciones o no. En el caso de que no tenga la altura necesaria le sugerirá al paciente una regeneración ósea antes del implante dental. Esta regeneración se realiza a través de injertos de hueso en el área. Así, sería posible instalar un implante dental a pesar de que el hueso maxilar se esté retraído.
Por último, hay casos en los que no se pueden hacer implantes dentales, como lo serían las personas embarazadas y los pacientes que están recibiendo tratamientos de radioterapia o quimioterapia. En este último caso, se debe a que la cicatrización del cuerpo del paciente es más lenta debido al tratamiento y podría afectar al implante.
Recuerda consultar con tu dentista las posibilidades que tienes de hacerte un implante dental, tomando en consideración tu historial médico y condiciones actuales de salud. Los especialistas se encargarán de tomar los exámenes necesarios para determinar si un implante dental se integraría bien a tu cuerpo.
En nuestras clínicas contamos con todos los recursos que necesitas para hacerte implantes dentales: no dudes en agendar tu próxima consulta con nosotros.
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¿Cuánto tiempo dura el implante dental?
El implante dental es una tecnología que se ha ido desarrollando desde el siglo XX y que en la actualidad ha significado una gran ayuda para la rehabilitación oral de las personas. Sus orígenes se relacionan con la figura del doctor sueco Per-IngvarBrânemark, quien al estar estudiando la microscopía en conejos descubrió la técnica de la osteointegración, la cual se refiere al proceso por el cual se produce una unión sólida entre un implante y el hueso natural de un ser vivo. Este descubrimiento revolucionó la odontología, permitiendo que los dientes perdidos puedan ser reemplazados por implantes dentales.
La instalación de un implante dental requiere dinero y tiempo, por lo que muchas personas se preguntan por la duración del mismo. ¿El implante será para siempre?
Los implantes dentales no son eternos y su duración abarca entre 15 y 25 años. Es la opción más duradera si se la compara con otros procedimientos dentales como las prótesis y los puentes. Están hechos de titanio, que es el mejor material para la integración con el hueso. La duración del implante está en estrecha relación con dos factores: la adecuada osteointegración del implante y el cuidado cotidiano que le de el paciente.
Por una parte, la correcta osteointegración del implante en el paciente será resultado de que el procedimiento sea llevado a cabo de buena manera y de que el hueso maxilar en el que se atornilla el implante esté en buenas condiciones (no retraído, con una altura de al menos 8-10 mm).
El cuidado del paciente respecto a su implante es de suma importancia. Inmediatamente después de la cirugía el paciente debe seguir al pie de la letra los cuidados post operatorios para favorecer la buena cicatrización del área intervenida. Estos cuidados incluyen buena higiene, poco movimiento bucal para cuidar el coágulo de sangre, no fumar, entre otros. Posteriormente, ya cicatrizado el implante, es importantísimo que el paciente siga con una adecuada higiene bucal, lo cual incluye el lavado de dientes al menos 2 veces al día y el uso de hilo dental o cepillos interdentales. El tener implantes dentales requiere una buena higiene para evitar complicaciones como la inflamación de encías, que puede desencadenar en otras patologías que pueden llegar a debilitar el hueso maxilar.
El implante dental consta de dos elementos: el implante y la corona. La corona tiene en promedio una duración de entre 10 y 15 años, menor a la del implante. La corona se puede aflojar o presentar pequeñas trizaduras del esmalte, pero son reemplazables. De todas maneras, una buena higiene bucal maximiza la duración de las coronas.
Los implantes dentales siguen siendo al día de hoy la mejor alternativa para recuperar la funcionalidad de las piezas dentales perdidas a lo largo de la vida. Son la opción más duradera si es que les entregas un buen cuidado. En Implanet contamos con todo el equipamiento y los profesionales necesarios para que tu próximo implante sea todo un éxito. Entra a nuestra página web https://www.implanet.cl/ o llama al +56 2 2759 0909 para agendar tu consulta.
¡Hasta pronto!
¿Cuándo puedo tener un implante dental?
Ya sabemos que los implantes dentales son una de las mejores opciones para recuperar la funcionalidad de uno o más dientes que se hayan perdido en el transcurso de la vida. El implante dental se instala en una cirugía de carácter ambulatorio y requiere ciertos cuidados que permiten la buena osteointegración del mismo en el hueso del paciente. A pesar de ello, el procedimiento tiene una gran tasa de éxito y es la solución más duradera para la rehabilitación de una pieza dental.
La principal circunstancia en la que puedes acceder a un implante es cuando hayas perdido una pieza de manera accidental o por patologías dentales, como lo son la enfermedad periodontal, la cual es una evolución de la gingivitis que a la larga puede debilitar el hueso maxilar y hacer que las piezas se caigan. Otra de las causas comunes de la pérdida de dientes son las caries, especialmente las que se encuentran en un estado avanzado y que por diversas circunstancias no son tratadas a tiempo.
Sea cual sea tu caso, es esencial que visites a tu dentista y consultes por la posibilidad de hacerte un implante dental. Uno de los requisitos indispensables para ser un candidato a este tipo de procedimiento es contar con un hueso maxilar sano y con la amplitud necesaria para sostener de buena manera el implante. Recordemos que el implante consta de dos partes: el implante en sí y la corona. El implante es atornillado en el hueso maxilar del paciente y posteriormente se busca la completa osteointegración de ambos (una unión sólida final). Esto es imposible en un hueso que no tenga al menos 8 o 10 mm de altura.
La retracción del hueso maxilar es un fenómeno natural que se produce en los huesos que se encuentran debajo de los dientes que se han caído, debido a la poca estimulación que reciben en cuanto a presión, la que en presencia del diente se produce por la masticación de los alimentos. Por esta razón es común ver personas que han perdido parte de su dentadura y que presentan una disminución de la magnitud de su mandíbula y retracción de los labios (especialmente en personas adultas mayores).
Una solución viable para esta condición es la regeneración ósea, en donde el dentista puede hacer injertos de hueso en el lugar donde el hueso se encuentra retraído y, con ello, aumentar la altura del mismo. Esto hará que el tiempo del procedimiento del implante dental aumente, pero aumenta las posibilidades de éxito.
Por último, es importante que seas mayor de edad, que no estés pasando por un proceso de embarazo y que tu salud sea compatible con el tipo de procedimiento quirúrgico que requiere el implante. De todas maneras, puedes preguntar con toda confianza a tu dentista si te encuentras en el mejor momento para recibir un implante dental o no. En nuestras clínicas contamos con el personal y el equipamiento necesario para llevar a cabo tu proceso de rehabilitación oral, a través de los mejores implantes dentales. Visítanos en nuestra página web https://www.implanet.cl/ o llámanos al +56 2 2759 0909 y agenda tu próxima consulta. ¡Te esperamos!